Esta es la historia de un joven gallego que conoce a una joven colombiana, residente en Vitoria-Gasteiz y vienen a celebrar sus bodas entre Viana do Bolo, Orense y Chaves, al norte de Portugal.
Javi y Astrid planificaron el día de su boda en dos partes, la ceremonia civil y , al día siguiente, la oficiosa, junto con la celebración posterior.
Lo primero que destacó fue el gran apego que entre las dos familias existía y que se dejó entrever durante los dos días.
Pero también la complicidad y cariño de los amigos de la pareja se puso de manifiesto, brindándole a la fiesta la consiguiente alegría y diversión.
Pese a que la lluvia, que no estaba invitada, hizo acto de presencia, esto no impidió que los novios y sus invitados disfrutaran de un maravilloso día de boda.