De vuelta a Sevilla. A una boda de cuento, o de leyenda. Los nombres de los contrayentes nos evocan viejas historias de reyes del pasado, de palacios, de esponsales ilustres. Blanca de Sevilla, Fernando de Madrid. 

Para hacer honor a estas remembranzas, decidieron celebrar su enlace en el centro de Sevilla. La novia optó por prepararse en el hotel Casa Imperial, muy apropiado. Y el ágape se realizó en la Casa de Pilatos, con un excelente catering preparado por Alfardos. Blanca vistió un precioso diseño de Victorio & Lucchino inspirado en un antiguo vestido nupcial de los años cuarenta del siglo pasado.

El día fue espléndido, con el calor habitual para esas fechas. Los invitados disfrutaron de la pareja y del lugar, de sus cuidados jardines y sorprendentes estancias, con magníficas obras de arte y restaurados mármoles que proporcionan una riqueza artística muy notable. El banquete se realizó en el patio principal y el baile en las antiguas caballerizas. Una boda festiva y alegre, una boda de cuento. Un disfrute para todos.